Tuesday, February 17, 2009

Barcelona día 3. 4Cats

Fui la primera en llegar, nunca aprendí mis líneas, hubiera fracasado como actriz, aunque intentamos hacer una visita ágil al Museo de Historia de la Ciudad, los lentos recorridos de las pasarelas romanas nos dejaron ver la luz hasta la hora de la comida, Iván y yo íbamos a pasar de comida para tomar mojitos, pero el grupo nos llevó a 4Cats, un restaurante que debió haber sido una cafetería cutre hace ochenta años, pero a la que Picasso solía ir y dibujar sobre las servilletas, siempre pienso en la anécdota del cheque. El estilo es modernista y el menú vale 23€, hay copias de mala calidad de obras de varios artistas de la época. Preferí el fideuá a la paella y disfruté más el brownie que el helado de yogurt. En Plaza Catalunya nos desviamos para comprar una tarjeta de memoria para la cámara en el fnac, camino a Montjuïc Iván me preguntó por el metro de Quito, me sorprende que no sepa de dónde soy y por los nervios también olvidó la capital de Colombia; al unirnos nuevamente al grupo supe que luego de siete meses desconocían mi origen. Venezuela o Uruguay, todos somos unos salvajes. Cuatro horas más pasaron entre el Museo Nacional de Arte de Catalunya y el CaixaForum, iba a quedarme a un evento de moda para encontrarme con Isabel, pero Iván decide por mi que debo darme una ducha y buscar algo más apropiado para la noche. Regreso a la casa de Isabel pero ella se ha ido y al abrir el portón del edificio descubro que he perdido la llave del piso, reviso la entrada, bajo el tapete, junto al ascensor, subo y la chica polaca de la que nunca supe el nombre me abre la puerta y trato de buscar nuevamente con calma, la llave no está, bajo nuevamente y después de siete minutos encuentro la llave en mi bolsillo, nunca he confiado en hello kitty cuya forma era el aro del llavero, debí guardar la llave en un acto reflejo. En mi maleta solo encuentro unas medias de malla negras, las botas altas y una minifalda, me miro varias veces al espejo del corredor, siempre esperé no tener que usar esa combinación, pero es mi mejor opción, así que me quito los pendientes y me voy. Debíamos encontrarnos en la estación de Liceu a las 10, pero ellos tardaron 40 minutos, mi falda, mis mallas y yo, recorrimos la rambla un par de veces escapando del frío la lluvia y la soledad de las luces de neón. Fuimos aun restaurante Indio en Nou de la Rambla donde Mauricio abrirá pronto su nuevo bar, a él le importa un pepino, ese pepino. Con Mauricio nos encontramos en la Plaza Reial a las 11:40, voy con todo el grupo, nuevamente nos dirigimos a Flamingos, hoy Mayka y Sofía, se visten de secretarias del 1,2,3 para atender el bar, creo que Sofía es sueca. Hoy el Dj es el guitarrista de Stab, la banda de rock en la que toca mauro, mientras tanto él y yo continuamos nuestra conversación. En Flamingos también está Magdalena su esposa, una chica sueca con la que se casó después de terminar la relación, un gran encuentro entre inmigración y civilización. Un red bull y un coctail de pepino y jinebra acompañan la noche, los del master lo pasan bien. Iván se va para People un bar cerca de diputación donde casualmente trabaja Alejandro con quien no pudimos vernos. Alejandro es amigo de Adriana, ahora se que baila claqué y cumple años en la misma semana que yo. Iván vuelve hacia las 4 y vamos con Mauricio, Mayka, Sofía y los de la banda al club Fellini. El club era un puticlub en los 70, rojo, negro y con una intensa vibración sexual, Mauricio e Iván hablan mientras yo bailo, evito el contacto visual que a esta hora parece determinante. Iván prefiere otra música. Un hombre baila sobre la barra y me recuerda a los dodó, es el encargado de relaciones del bar y sabe muy bien lo que hace. El pelo rojizo, el bigote oscuro y el pantalón ajustado y caído sobre sus delgadas piernas, bailan con el foco naranja que lo comunica con la lengua de una francesa. Iván decide irse porque debemos madrugar, Mauricio y yo nos quedamos junto a la barra y solo hasta las seis salimos de allí. Frente a la estación, mientras Mauricio saluda a un amigo suyo que dice no saber como se llama, una rubia de vestido violeta besa a Mayka quien sonriente me dice que Magdalena, la esposa de Mauricio es de puta madre.

No comments: